La película obtuvo un gran reconocimiento de la crítica que, como ya se sabe, no garantiza la misma suerte con el público. Su excéntrica temática, que hace que el protagonista se debata entre si está viviendo un sueño o la realidad, y un nuevo estilo de animación ha hecho que con el paso del tiempo la cinta pueda presumir de haberse convertido en un film de culto, lo que animaría a Linklater a repetir más adelante el experimento con A Scanner Darkly (Una Mirada A La Oscuridad) (2006) sin obtener la misma suerte en su resultado, aunque como todas sus películas es mejor ver para opinar.
Todas las conversaciones y reflexiones del personaje principal con la gente que va encontrado son interesantes, aunque quizá resulten demasiado profundas. Además es muy difícil captar la atención cuando los trazos no paran de moverse y vibrar, ya que no puedes dejar de ver cómo cambia "físicamente" cada personaje dependiendo de su estado de ánimo o de la relevancia que le quiere dar a lo que está exponiendo. Y no significa que esto último sea malo, al revés, es uno de los recursos utilizados que hacen de Waking Life un peli original.
La verdad es que la película te hace reflexionar en algunos momentos, pero sinceramente me quedo con el Richard Linklater que lleva a Ethan Hawke y Julie Delpy de viaje por Europa, con ese guión vivo que consigue mantenerte pendiete en cada una de las conversaciones. Conversaciones en las cuales te gustaría participar.
Pero para gustos lo colores, y en Waking Life hay muchos colores a los cuáles se les debería dar la oportunidad al menos de ser vistos alguna vez porque valen la pena.
Puntuación: 7/10
Waking Life en FilmAffinity
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