La bendita HBO sigue deleitándonos con sus series y mini-series. El prestigio que ha alcanzado esta marca les permite contar con gente del nivel de Evan Rachel Wood, Guy Pearce o Melissa Leo (que ha participado en otras series de la cadena como Treme). Pero conseguir que Kate Winslet acepte participar en una serie de este estilo se me antojaba algo, más que complicado, raro.
Pero como tantas otras veces, este papel de Mildred Pierce parece hecho a la medida de la mejor actriz de esta generación. Kate se vuelve a enfundar en su personaje y se convierte en esa mujer americana de los años 30 que lucha por salir adelante tras cada tropiezo.
Con cinco capítulos de una hora aproximadamente cada uno, el director consigue hacernos ver cómo esta mujer sale a flote una y otra vez a pesar de que su gente más cercana le falle cuando menos se lo espera. Mildred demostró ser una mujer emprendedora a pesar de tener que vivir esa Gran Depresión americana que hacía que la vida pareciese dedicada exclusivamente al hombre.
Es importante ser consciente del tiempo en el que se centra la historia porque es cierto que el espectador puede no estar de acuerdo con todas las decisiones que toma la protagonista, por supuesto, pero hay que tener claro qué haríamos nosotros con una mentalidad de hace 80 años, si seríamos tan modernos como pensamos o nos dejaríamos llevar por las ideas de la época, como siempre ha sido habitual.
Recomendada para gente que disfrute con las interpretaciones, que parecen estar por encima de la calidad de lo que se cuenta, pero es que con este elenco es casi imposible que esto no ocurra.
Puntuación: 7.5/10
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